lunes, 19 de julio de 2010

Capítulo 5




Bueno despues de tanto tiempo subimos cap ;) y decir que esta vez será a partir del punto de vista de Matt ya que es uno de los personajes más importantes=D, decir tambien que esperamos que tengais un fantatico verano y que pronto cogeremos "cara" para el resto de personajes:).
Esperamos que os guste. Bss


-----------------------------------------------------------------------------------



¿Cómo había llegado mi padre a casa?, en teoría estaba ingresado en el manicomio….Cogí la moto, tendría que llegar lo más pronto posible sino…

¿Cómo estaría mamá?, tan delicada que estaba…., en ese momento un odio invadió mi interior, como pillara a Sebastián haciéndole algo a ella…o…Cath. Me había olvidado de ella, no la podía tocar, a ella no. Acelere.

Cogí el móvil sabiendo en todo momento que era ilegal, sin embargo era una excepción. Llame a la policía, rápidamente les di todo lo necesarios y colgué.

Ya podía ver mi casa, aceleré aun más. Ya voy mamá…, Cath espérame…-pensé. Al llegar deje aparcada la moto de cualquier manera, solo salí corriendo hacia mi edificio. La puerta estaba abierta así que solo tuve que correr unos pocos metros más para ver como mi madre estaba estirada en el suelo y Sebastián…, Sebastián estaba encima de Cath, la cual estaba tumbada en el suelo medio desnuda. No paraba de oponerse a cada movimiento de mi padre, impidiéndole que llegara realizar su cometido.

No me lo pensé dos veces, cogí a Sebastián por los hombros haciendo que se cayera hacia atrás, con tal mala suerte que se dio contra una mesilla…

-Cath…, dios di algo…-la tambalee un poco mientras le tapaba con su camiseta.

-eres idiota Matt…, siempre tan sensible…-dijo Sebastián mientras bebía de una botella.

-¡vete de aquí!, espero que no le hayas hecho nada porque te juro que te arrepentirás…-le amenacé.

-sabes que nunca cumples tus promesas… ¿por qué esta vez tendría que ser diferente?-dijo mientras tiraba la botella vacía al suelo

-he cambiado, no soy como tú-le reproche mientras seguía mirando a Cath.

-pero sigues siendo un vulgar ladrón…. Tienes mi sangre Matt…, nunca cambiaras-le mire con odio, siempre había sido un borracho….

-¡cállate!, vete de aquí y no vuelvas nunca más porque te lo juro…te arrepentirás-de repente entraron tres agentes de policía, dos de ellos cogieron a Sebastián. El otro se quedo mirando lo sucedido.

-llamare a la ambulancia…-se dirigió a la otra habitación.

-Cath…por favor…, levántate.-la volví a tambalear mientras aguantaba ese nudo en la garganta que me impedía respirar…-niña, por favor…esto aun no ha acabado…-intente sonreír mientras miraba a mi madre.- ¡mama!-grite-¡mama por favor!

-¿Ma..att?-escuche en un suave respiro.

-Cath…, o Cath…menos mal…-la arrime contra mi pecho.

-tu padre…-dijo salto de un golpe y arrimándose a la mesita.

-ya esta…, tranquila…, todo a pasado.-le volví a tapar mientras me ruborizaba, a ella le paso lo mismo ya que enseguida cogió la camiseta. Tapándose rápidamente se volvió a alejar.-¿estás bien?-le pregunte dudoso.

-sí, es solo que necesito estar sola…-intente acercarme un poco sin embargo…

-por favor Matt no te acerques…-dijo mientras intentaba ¿protegerse? de mi.

-Cath sabes que…

-no Matt, ¡aléjate!. Necesito tranquilidad…-gritó. Pude observar como pequeñas lágrimas bajaban por su rostro. Decidí alejarme cuanto antes y ver como estaba mi madre. La cogí delicadamente mientras escuchaba el latido de su corazón, necesitaba escuchar que latía con normalidad.

-Mama…, te juro que nunca más volverá. Nunca más volverá a pisar esta casa…-dije mientras apoyaba mi cabeza sobre la suya, el nudo en la garganta seguía. Notaba como mis lágrimas podrían surgir de un momento a otro pero…, tenía que aguantar.

-Matt…, no le ha hecho…daño.-escuche que me decía Cath desde el otro lado.-solo se desmayo…-volvió a decir mientras controlaba su nerviosismo. Simplemente le sonreí.

-dentro de unos segundos llegara la ambulancia, el detenido ya está siendo llevado a la comisaria.-dijo el policía de antes mientras se acercaba a tomarle el pulso a mi madre.

-gracias agente, solo le pido que no le vuelvan a dejar pisar esta casa-dije mientras mi voz cobraba el mismo tono de siempre.

-haré todo lo que este mi mano-me sonrió. En unos segundo escuchamos como la ambulancia había aparcado cerca de aquí. El policía se levanto rápidamente.

-¿donde están?-dijo una chica morena con un maletín en la mano, el policía nos señalo.-chico será mejor que te alejes….-le hice caso.- ¿tu estas bien?-me pregunto mientras le tomaba el pulso.

-si, a mi no me ha pasado nada…-dije volviéndome hacia Cath.

-Abi, ¿dónde están?-entraron dos chicos mas con una camilla, en seguida se llevaron a mi madre. Vi como esa tal Abi intentaba razonar con Cath sin embargo…, no parecía que estuviera funcionando.

-tu amiga no deja que nos acerquemos…, será mejor que hables con ella. Cuando este todo arreglado me avisas…-dijo mientras salía de la habitación.

Me fui acercando poco a poco a ella, dejando un cierto espacio para que no se pusiera nerviosa.

-¿aquí está bien?-le sonreí.

-si.-me miro desconfiada- Puedes reírte si quieres…, supongo que esperabas verme de esta forma…-dijo mientras me fulminaba.

-puede ser, no te lo niego. Pero sé perfectamente cuando es el momento para cada cosa-me acerque un poco más.

-¿y cuando crees que seré el momento?-dijo mientras se tapa, decidí tirarle mi camiseta. No era gran cosa pero…, al menos podía ponérsela.

-cuando empieces a burlarte de mi…-le volví a sonreír acercándome un poco más.

-solo estoy nerviosa, sigo pensando que eres un idiota.-se coloco bien mientras me inspecciono bien de arriba abajo. Le sonreí.

-¿te impresiono?-me volví a acercar.

-eres grande, pero nada de otro mundo.-se ruborizo.

-¿ves?, ya vuelves a tener ese color en las mejillas, ¿o es que te gusta que este así de cerca?-me volví a acercar agachado, haciendo que mis músculos resaltaran aún más.

-no seas idiota..., es que ya estoy un poco mejor.-Acerco ágilmente su cara a la mía en modo de superioridad.

-¿eso significa que todo vuelve a ser como antes?

-por supuesto, nunca han cambiado.-sus ojos brillaban cada vez más, estaba volviendo a ser ella. Sonreí.

-entonces es hora de robarte otro de tus besos-al oír eso intento separarse, sin embargo yo fui más rápido. Intento resistirse así que la acerque más a mí, aún estaba tensa.

Pareció relajarse un poco así que deje de apretarle contra mí, un error. Enseguida recibí otro de sus bofetones.-ahora sí que es como antes-le sonreí.

-como sigas así tendré que tomar mediadas-me reto.

-quiero ver que medidas tomas contra mi…- fui acercando todo mi cuerpo hacía ella, haciendo que no tuviera otra elección que tumbarse.

-¡Matt!, ¡levántate!-le tape la boca, estaba gritando demasiado.

-¿cómo se piden las cosas princesita?-acerque mi rostro al suyo. Le destape la boca.

-por favor-sonrió furiosa.

-¿toda la frase?-le sonreí juguetón.

-Matt, ¿podrías levantarte por favor?

-ahora si-me fui levantando poco a poco, se levanto más rápido de lo previsto haciendo que me callera. Perdió el equilibro y acabo encima mío.

-ya entiendo…, querías estar encima mío…-la cogí por la cintura.-me lo hubieras pedido. -reí.

-sigues siendo un crío.-me miro con reproche.

-pero soy tu crio.-le sonreí. Di que no te lo pasa bien conmigo…-espere unos segundos a que contestara, simplemente sonrió. Le coloque un mechón de pelo.-estas guapísima…, y me alegro que todo haya pasado-intente volver acercarme a ella.

-yo no salgo con críos Matt-me sonrió mientras se levantaba.-ya puedes decirle a tu amiguita que estoy bien…, solo era nerviosismo.-se apoyo en la puerta mientras me miraba divertida.

-adiós baby-se fue. Derrotado volví a recostarme en el suelo. Esta tía me mata-pensé divertido.

Pare de soñar y me dirigí corriendo hacia la ambulancia, estaban a punto de partir.

-lo siento chico pero no puedes subir, tendrás que ir de otra forma.-me dijo la chica mientras ponía en marcha el vehículo.

Fui corriendo a coger la moto, enseguida la tenía preparada para marchar. La ambulancia estaba a unos cuantos metros así que tuve que acelerar, seguirla sería fácil.

[***]

Dos malditas horas haciéndole pruebas, y yo marginado en una habitación, donde tarde o temprano la traerían. Escuche como la puerta se abría poco a poco, nervioso me detuve delante de ella.

-¿qué haces aquí?-le pregunte a Cath sorprendido.

-ver como esta tu madre…,¿sabes algo?-dijo mientras se quitaba una chaqueta de cuero dejando al descubierto una camiseta negra de tirantes con el logotipo de mango.

-no, aún no se nada.-me senté. Ella se coloco delante de mí, en una camilla..-puedes irte…, ya te avisare cuando…

-no, quiero ver con mis propios ojos que está bien.-me interrumpió.

-¿seguro que es eso?-le sonreí.

-¿Qué otra cosa sino?-me miro confundida.

-a lo mejor es que quieres pasar un rato conmigo…-me levante, note como su mano se depositaba en mi pecho.

-no estropees el momento-me miro desafiante.

-yo no iba a estropear nada…., solo me iba a acercar a ti… ¿Eso es estropearlo?-puse cara de niño bueno.

-si-suspiro- ¿Por qué tienes que creerte tan…

-¿perfecto?, ¿simpático?, ¿gracioso?...-intente adivinarlo.

-¿superior?.-me quede callado.-si te comportarás de otra forma tal vez ahora…

-¿no estarías enamorada de mi?-volví a sonreír, no pudo evitar ruborizarse.

-no estoy enamorada de ti-contraataco.

-tus ojos no dicen lo mismo-me acerque lo suficiente como para poder rodear a Cath apoyándome en la camilla. Tuve cuidado en todo momento para no tocarla, solo rodearla…

-hace tiempo que mis ojos dejaron de hablar….-me miro con superioridad.

-pues me da la sensación que te los he vuelto a resucitar…-acerque poco a poco mis labios a los suyos, sin llegar a depositarlos me aleje.-estoy cansado de ser siempre el que te roba un beso…

-¿y que quieres que haga?, siempre me pillas de improviso y sabes que lo odio –me miro “enfadada”.

-vale, jugaremos a tu juego. Me odias, solo soy un estúpido ladrón, un idiota, engreído, solo quieres que me aleje de tu vida…Dime todo eso a la cara y me iré para siempre-me quede totalmente quieto mientras sus ojos se clavaban en los míos.

-esta bien…, te odio, solo eres un estúpido, vulgar ladrón, un idiota, te crees el centro del mundo…, y…solo quiero que te alejes de mi vida.-me mantuvo la mirada, indignado me dirigí a la puerta. Iba abrirla cuando se coloco delante de mí…

-si me dejas que la abra…-rápidamente me calló con un beso. Paso sus manos por mi cuello, intensificando cada vez más el beso, empotrándome otra vez con la camilla. Poco a poco se fue separando.

-y eso es una pequeña parte de lo que piensa mi cabeza…, que si no te hubiera conocido mi vida seguiría siendo normal-me sonrió-pero también pienso que eres una persona excepcional, cariñosa, protectora…. Y que eres un idiota por haberme robado el corazón…¿no te bastaban las joyas? – volvió acercase a mis labios, rápidamente se separo.

-¿todo eso es verdad?-le sonreí.

-no, era para que te quedaras un poco más…-dijo sarcásticamente.

-estas aprendiendo…-la abracé.

-he aprendido del mejor…-sonrió.

-¿Quién?-me giré haciendo como si hubiera alguien más. Volví a mirarla-oh!, ¿yo? –me reí.

-eres idiota…

-si sigues así tendré que lavarte la boca con jabón, no paras de decir palabrabotas princesa…-mire sus labios. Se rio divertida al ver mi expresión. La cogí en brazos y me volví a sentar en la silla, mientras apoyaba a Cath en mi pierna.- ¿vas a robarme un beso?-le volví a sonreír.

-ya te he dado uno…-me miro divertida.

-y te lo he devuelto…, así que no es un beso robado. Quiero un robado…

-eres exigente…-dijo mientras se mordía el labio inferior. Simplemente le sonreí.-esta bien pero quédate quieto…-fue dándome pequeños besos por el cuello, luego uno en la frente…, poco a poco fue bajando, por mis cejas, mis ojos….Deposito uno muy cerca del labio…, volvió a separase. Me miro divertida sin poder aguantar una risilla…

-¿Por qué me torturas?-pregunte suplicante.

-tu lo has hecho durante todo este tiempo así que…estamos en paz.- volvió a acercarse despacio a mis labios, estaba vez si que deposito unos pequeños. En uno de ellos se paro, intensificándolo cada vez más. Me acariciaba el cuello suavemente, mientras con la otra jugaba con mi pelo. No podía más esa chica me iba a matar… Intente aguantar lo máximo posible… pero sabia como hacerme enloquecer. Le devolví el beso. Casi tirándole la acerque completamente a mi. Sentía su torso apoyado en mi pecho…., por primera vez…sentía que la chica me correspondía.-Te quiero…-me dijo en un susurro. Simplemente le sonreí, luego nos volvimos a fundir en un de otro de nuestros besos…, besos que nos unían como nada en el mundo…




*ATENEA*

viernes, 25 de junio de 2010

Capitulo 4

Bien, cogemos un vaso de orchata (aunq a mi no me gusta la orchata u.u'), abrimos a la ventana, nos sentamos delante del Pc y leemos el cap que es largo en recompensa del tiempo que he tardado en escribirlo >.< Atens ya me ha hechado la bronca por la tardansa, así que sólo puedo esperar que me perdoneis y que disfruteis del cap tanto como yo he disfrutado al escribirlo, deverdad me he emocionado un monton, no os asusteis demasiado :D
        ----- 
Cuando llegue a casa no podía soportar ya la tensión y me eche a llorar en mi habitación, había estado sonriendo falsamente el resto de la tarde para que Luke no se preocupara, aunque sabía perfectamente que él no se creía ninguna de esas sonrisas. Lágrimas de impotencia se deslizaban por mi mejilla precipitándose al vacío, aun recordaba perfectamente la bofeteada en mi cara. Lo peor era que ni siquiera había podido recuperar el collar de mi madre, le había fallado, era lo único que me quedaba de ella, otra lágrima se deslizo rápida por mi mejilla.

-La princesa está triste... ¿Qué tendrá la princesa?
Los suspiros se escapan de su boca de fresa,
que ha perdido la risa, que ha perdido el color.
La princesa está pálida en su silla de oro,
está mudo el teclado de su clave sonoro,
y en un vaso, olvidada, se desmaya una flor. -recito Matt cerca de mí, me levante rápidamente enfrentándome a él, en ese momento estaba furiosa. El me miraba con una nota de dolor en los ojos, pero aun así manteniendo su sonrisa seductora- Vengo en son de paz-añadió dejando a mi lado una rosa negra. Muy apropiado por parte de él decir que venía en son de paz...
-Pues has venido al sitio equivocado, estúpido ladrón, aquí sólo hay guerra-dije mientras me lanzaba hacia él con la intención de propinarle un puñetazo, sin el menor síntoma de haber ejercido algún esfuerzo me cogió por las muñecas, haciendo que me mantuviera a una distancia prudente de él.
-Cat, lo siento, yo...no te lo puedo explicar y tampoco espero que lo comprendas ni que me perdones, sólo he venido a devolverte el collar- dijo sin dejar apartar sus manos de las mías.
-Suéltame-masculle aun furiosa.
-Valoro demasiado mi vida- susurro mientras me miraba directamente a los ojos, de una manera tan profunda que cualquiera diría que podía leer la verdad en ellos. Aparte la vista y sentí como poco a poco él se iba acercando a mi oreja.
-Si te suelto... ¿Prometes perdonarme la vida?-me preguntó en tono gracioso.
Mantuve mi silencio hasta que me soltó. Deposito el collar sobre mi almohada y sin decir nada más, recorrió la habitación y salió por la ventana, esta vez no me moleste en comprobar si se había hecho daño, simplemente deje que mis rodillas se flexionaran, dejándose caer al lado de mi cama, junto al collar, que seguía ahí, como si nunca hubiera desaparecido, como si nunca hubiera sido robado...
De repente unos cálidos labios se presionaron contra mi cuello, provocando que mi corazón se detuviera durante unos cuantos segundos y empezara segundos después a latir más rápido.
-¿Qué noche puede sobrevivir sin luna?- preguntó depositando otra luna plateada junto al collar, y después girándome para que volviéramos a quedar cara a cara- ¿Y cómo puedo sobrevivir yo sin probar tus labios de fresa mi princesa?- añadió acercándose lentamente y deteniéndose a pocos milímetros de mí, provocando que su aliento golpeara de forma tentadora mi piel, casi podía sentir el roce de sus labios contra los míos, hasta que a la final él termino cerrando el espacio existente entre los dos con un dulce beso, un beso bajo la luz de la luna...-Se separó lentamente de mí, y con un último roce de nuestros labios dijo:
-Buenas noches princesa, hasta que el destino vuelva a unir nuestros caminos- y dicho esto salto por la ventana.
Ladrón imbécil- pensé.
Si él pensaba que caería rendida a él cada vez que acercaba sus labios a los míos, estaba muy equivocado. Esta vez el destino no elegiría el lugar de nuestro próximo encuentro, lo elegiría yo.

[…]
Saltaba de tejado en tejado, mientras cogía los tesoros más valiosos, que podría tener una familia rica actualmente, pero de repente sentí una mirada clavada en mí, la ignore, salí de allí, y como alma que lleva el diablo no sin antes dejar la pequeña estrella...
[…]
Otra vez ese sueño, el que me rondaba cada noche desde su primera visita, pero este había sido diferente, y no recordaba porque...
Me levante lentamente, me dirigí hasta el baño, una ducha caliente seguramente ayudaría.

Cogí lo primero que encontré y me dirigí rápidamente a los establos, necesitaba algo de tranquilidad en mi vida, y que mejor que Tornado.
Al llegar encontré a Luke cepillándolo.
-Ei- dije simplemente
-¿Tienes planes para hoy?- preguntó con curiosidad
Medite un momento su pregunta y finalmente conteste:
-No.
-Bien, te voy a llevar a dar un paseo, he conocido a alguien que te va encantar-dijo entusiasmado.
Le mire un poco dubitativa
-Tranquila, juega en mi equipo, ya me entiendes, se llama Alec, seguro que te cae muy bien- dijo entusiasmado mientras guardaba todo en el establo.
Suspiré resignada, sería un día muy largo...
Cogimos su moto y nos dirigimos al centro de la ciudad. Entramos en el centro comercial.
-¿No me digas que trabaja en una tienda de ropa?- pregunte sarcástica mientras me aguantaba la risa.
-No, niña imbécil, trabaja en un lugar que seguramente te gustara- dijo en un tono misterioso, dejándome con la intriga.
Caminamos hasta llegar a un pequeño anticuario, no estaba muy lleno, pero había cosas preciosas, en las paredes colgaban fotos en tonos sepias, habían lámparas de araña, parecía un lugar abandonado por el tiempo.
-¿Buscas algo?- me pregunto de repente un chico moreno de ojos grises, sobresaltándome.
-Esto..
-Alec es Cat-dijo Luke interrumpiéndome.
-En 5 minutos estoy y nos vamos a comer- dijo y luego se volvió a girar hacia mí, dándome un beso en la mejilla- Por cierto, un placer conocerte- y dicho esto se fue.
-No sabía que íbamos a comer- dije yo girándome hacia Luke.
-Ni yo- dijo el en tono divertido.
-Me cae bien- dije
-Me alegro- dijo Alec sobresaltándome por segunda vez, escuche como se reía-¿Qué? ¿Un italiano?- pregunto mientras se ponía la chaqueta.
-Nos os apetece que vayamos mejor a un...
-Sí, un italiano está bien, yo conozco uno que está muy cerca- dije cortando a Luke, el simplemente puso los ojos en blanco.

Llegamos en menos de cinco minutos entre risas y miradas comprometedoras (entre Luke y Jace).
Busque con la mirada a Matt, pero al único que encontré fue al camarero de siempre que se acercaba a nuestra mesa.
-¿Que van a pedir?- pregunto en tono agradable.
Alec y Luke cogieron la carta.
-¿No esta Matt?- pregunte con un poco de curiosidad
-No, hoy es su día libre- dijo en un tono, esta vez un poco malhumorado y creía saber porque, seguramente Matt le habría dicho que lo de su madre no era verdad, sofoque una risita nerviosa.
Entonces me di cuenta de algo en lo que no había caído antes, su madre, ¿Porque se había enfadado tanto?.
Comí en silencio mientras Luke y Alec seguían hablando.
-¿Vamos a dar una vuelta?-propuso Luke.
-Yo no puedo, había olvidado algo que tenía que hacer, iros vosotros ya pago yo- dije mientras en mi cabeza se empezaba a formar un plan. Aceptaron y se fueron. Yo me dirigí rápidamente hacia el camarero.
Deje el dinero y mientras él lo contaba solté la pregunta.
-¿Me podría decir donde vive Matt?- pregunte poniendo ojitos suplicantes.
-Lo siento pero esa es información confidencial- dio el camarero. Deposite unos cuantos billetes más.
-¿Y no podría hacer una excepción?- pregunte de nuevo.
El camarero suspiro con resignación, cogió una hoja y me escribió la dirección.
-Que sepa que es un barrio muy peligroso- me informo mientras me marchaba.

No se equivocaba, había gente de todo tipo, me encamine rápidamente a mi destino. Un edificio de color azul desgastado, subí las escaleras y tal y como me indicaba el papel pique en la puerta número tres. Tras la puerta apareció una señora de mediana edad con los mismos ojos de Matt, casi pensaba que era imposible que existieran otros ojos de ese mismo color. La señora al verme puso una cara extraña.
-Hola...esto...soy amiga de Matt- dije torpemente a modo de presentación. La señora suavizo su expresión.
-Pasa, él no está aquí pero puedes tomar un té y hacerme compañía- dijo en un tono muy agradable, que me recordó al de mi madre.
La casa era bonita, tenía pocos detalles pero era muy confortable.
-¿Así que eres amiga de Matt? Él no me ha hablado nunca de ti- dijo la señora en cuanto me senté.
-Trabajamos en el mismo sitio- le infome, por no decir que el robaba en mi casa.
Su madre me sonrió dulcemente.
-Seguramente Matt llegue tarde, está en su otro trabajo- me informo
-¿Otro trabajo?- pregunté
-Sí, porque si no no podría pagar mi tratamiento- dijo encogiéndose de hombros, en ese momento me atravesó una punzada de culpabilidad.
-¿Tratamiento?
-Sí, tengo cáncer- me informo
-Yo...lo siento- dije mientras me levantaba y me dirigía a la puerta, pero de pronto esta se abrió súbitamente haciéndome retroceder. Un hombre con olor a cigarrillo y alcohol entro por ella, en pocos segundos tuve a la madre de Matt a mi lado.
-¿Quién es esta muñequita?- preguntó aquel hombre mirándome de los pies a la cabeza, provocando que un escalofrió me recorriera la espalda.
-Sebastián déjala empezó, ¿qué haces tú aquí?- pregunto su madre interponiéndose entre él y yo.
-Linda sólo busco un poco de diversión, ¿Si?, no hay nada de malo en eso- dijo con una sonrisa, mientras se acercaba a nosotras.
-No te atrevas a...
No dejo que terminara la frase, ya que le cruzo la cara de una bofetada, y se fue acercando más a mí.
-No temas preciosa, esto será divertido-dijo mientras se acercaba a mí, le propine una patada y salí corriendo hacia Linda, que aún se estaba recuperando. Entre en la primera habitación que vi y cerré la puerta.
-¿Tiene el número de Matt?-pregunté nerviosa
-Si- dijo mientras me tendía su móvil temblorosa y miles de lágrimas se abrían paso en sus ojos.
El móvil sonó dos veces hasta que lo contesto.
-¿Mamá pasa algo?-preguntó en tono preocupado
-Matt soy Cat, estoy en tu casa y ha venido tu padre que ha pegado a tu madre y está a punto de entrar en la habitación-dije con voz temblorosa
-Cat como sea otra de tus bromas, te juro que...-dejo la amenaza inacabada.-Voy para allá-dijo y colgó.
Me gire y me encontré a la madre de Matt inconsciente.
La puerta estaba a punto de fallar.
-Preciosa no tengas miedo, abre- repetía una y otra vez Sebastián
Hasta que finalmente la puerta cedió.
-Bien muñeca, vamos a divertirnos un rato-dijo acercándose cada vez más a mí.
-No se acerque más a mí- dije intentando sonar fuerte, pero la voz se me quebro.
Cogí lo primero que encontré y se lo tire, él lo esquivo con facilidad, y en menos de tres pasos me cogió por las muñecas inmovilizándome.
-Por favor- suplique
-Nena sólo diviértete- dijo, y todo su mal aliento me golpeo.
Le di un rodillazo que le dejo sin respiración, durante unos cuantos segundo en los que intente correr, pero él me cogió por el tobillo, provocando que me diera con el borde de la cama y poco a poco todo se volviera más oscuro, sólo sentí como posicionaba su cuerpo encima del mío...
Jenn...*]]




sábado, 20 de marzo de 2010

Capítulo 3


Perdon por haber tardado tanto..., no tenia tiempo y ahora me estoy poniedno al día TT. Jeen no me mates.

Bueno aq va el cap, a quedado bastante raro pero... espero que os guste. ;)


------------------------------------------------------



-¿Qué hizo qué?-pregunto Luke mientras nos sentábamos en la hierba.

-ya te lo he dicho…, me beso y me robo el collar, luego…se fue.-Le explique un poco más calmada lo que había pasado con Matt la noche anterior, Luke nunca se lo diría a nadie…

-no entiendo como un ladrón como él puede hacer tal cosa…-se metió un chupa chups en la boca, siempre se distraía con algo.

-¿Un ladrón como él?-le mire extrañada, es verdad que los ladrones suelen ser más… ¿diferentes? Pero…Un ladrón siempre es un ladrón.

-por lo que has dicho es bastante guapo…, así que… porque un ladrón guapo, fuerte…¿tendría que robar?. Podría conseguir trabajo como modelo o…

-Luke, no me vengas con tus cuentos gays.- le mire desafiante.- Aunque ese tío pueda ser uno de los chicos más guapos del mundo… no quita que me haya robado mi collar. Ese collar que mi madre eligió para mí- Soné bastante enfadada, la forma en que me lo había quitado era estúpida. Nunca nadie me había quitado algo que me importaba…nadie. Cambie totalmente de chip. Nunca nadie me había robada de esa manera y él no sería el primero. Me levante rápidamente del suelo, Luke me miro sorprendido mientras jugaba con el chupa chups. -¡Levántate!, voy a recuperara lo que es mío- dije severa.

-¿Cómo pretendes pillar a un ladrón?-pregunto mientras se levantaba.- en teoría se esconden y eso...¿nunca has visto una peli de polis?.

- le cogí de la mano para que andara mas rápido.

-seguramente he visto mas pelis de polis que tu pero, la diferencia es que este ladrón tiene un trabajo. Y es uno bastante visible si tienes dinero y te puede permitir un italiano...-me gire hacia él para que viera mi sonrisa de superioridad, una sonrisa que me hacía sentir al mando de este juego. Un juego que no estaba dispuesta a perder.

Luke dejo su moto delante de la puerta del restaurante, en todo el recorrido habíamos estado callados, ninguno de los dos decía nada. Iba a entrar, sin embargo Luke me detuvo.

-¿Qué?-le medio grite, me corregí.-perdón-me miro satisfecho.

-relájate, habrá bastante gente no querrás montar un espectáculo ¿no?

-está bien-respire unas cuantas veces-vamos.-asintió sonriendo.

-buenos días, ahora mismo os busco una mesa-dijo el camarero con una carta en la mano.

-gracias pero no hace falta-sonreí- queríamos hablar con el lavaplatos.

-lo siento madame, creo que eso no es posible.

-¿Cómo que no es posible?-grite, Luke me sitio rápidamente detrás suyo.

-lo que mi amiga quiere decir es… ¿porque no es posible?- El camarero nos miro con cara de pocos amigos, Luke seguía manteniéndome al margen.

-está en horario de trabajo, no puede perder tiempo con niñerías.

-¡no son ni…- iba a volver a gritar cuando Luke me tapo la baca

-discúlpele, le afectado mucho que la madre de..¿Matt?-me miro dudoso, asentí- haya muerto y…queríamos decírselo nosotros…-dijo teatrero con un tono triste.

La verdad no me gustaba mentir sobre la muerte pero si era la única manera en que lograría verle…haya muertes.

-¡oh!..., no lo sabía…, si, será mejor que se lo digáis vosotros…, no quiero problemas-mire agradecida a Luke mientras el camarero nos guiaba hacia Matt.

-Matt tienes visita. Sera mejor que os deje solos…-Matt iba a rechistar pero el camarero ya se había ido.

-¿puedo ayudaros?-dijo con su suave tono de voz, cada palabra que decía eran como notas musicales… Notas que penetraban por mis oídos dejándome en el limbo.

-No me vengas con estupideces, sabes perfectamente lo que quiero y ¡lo quiero ahora!-exigí mientras le miraba desafiante. Luke se apoyo contra la pared viendo el…”espectáculo”

-¿quieres que te devuelva el beso?-pregunto gracioso, Luke le miro sorprendido.

-¿Qué?- pregunte sorprendida-¡no!, no quiero nada tuyo y menos un beso…¡solo quiero que me devuelvas el collar!-le grite. Me abalance para pegarle un buen puñetazo pero Luke me detuvo.

-Tranquilízate Cat-respire hondo, luego hice que me soltara. Volvió a su sito.

-¿necesitas un guardaespaldas para controlarte?, patético ¿No crees?-me reto.

-no, cállate. ¿Y puedes devolverme el collar?-medio suplique.

-¿Por qué es tan importante para ti?-se veía que disfrutaba con esa situación.

-lo eligió mi madre…, pero eso a ti no te importa así que devuélvemelo-me miraba con atención, la luz de los fluorescentes hacían que tuviera un brillo especial.

-necesito tiempo, no te lo puedo devolver- cogió unos platos que habían allí encima, se puso a limpiarlos.

-¿Cómo que necesitas tiempo?, Matt es mío…, es importante para mí, ¿no lo puedes entender?

-¿ya se lo habéis dicho?-dijo el camarero interrumpiéndonos.

-¿el que me tenéis que decir?-pregunto Matt interesado

-lo de tu madre…-paseo su mirada sobre los tres.

-aún no se lo hemos contado…, necesitamos cinco minutos más por favor -respondió Luke con su encanto natural. Todo el mundo caía a sus pies, daba igual del sexo que fuera, la edad que tuviera…Luke era alguien tremendo.

-¡oh!, está bien…, lo siento mucho. Pero será mejor que se lo digáis rápido, lo necesito dispuesto cien por cien al trabajo.-se fue rápidamente.

-¿Qué le ha pasado a mi madre?- pregunto Matt preocupado.

-nada –dije.

-quiero que me digas ahora mismo que le ha pasado a mi madre-dejo los platos en su sitio, enfadado se saco los guantes acercándose a nosotros.

-te repito que nada, solo era una escusa para que nos dejaran hablar contigo…-le explique que habíamos mentido, se trataba de su madre y…

-¿y se puede saber que excusa le habías dado?-se siguió acercando a mí.

-que bueno…había muerto pero…-no me dejo terminar, me había dado una bofetada. Mi rosto se giro rápidamente dolorido. Luke le empujo fuertemente.

-¿eres idiota o que tío? . Estas bien Sele?-me cogió de los hombros.

-si…bueno…-hice gestos con la boca, me dolía un montón.

-¡como se te ocurre mentir con semejante cosa!-me grito Matt.

-y a ti como se te ocurre pegarle!, es una chica…¿Qué dignidad tienes?-me defendió Luke.- para tu información mentí yo, ella no digo nada.- Matt se quedo pensativo un rato.

-¡largaros los dos!, solo sois un par de mentirosos.

-y tu un estúpido ladrón- articule difícilmente.- ten en cuenta que si a ti te importa tu madre, a mi también la mía.- le mire con odio.

-¡qué os larguéis!- Matt tiro un plato al suelo, resonó por toda la cocina.

Nos fuimos lentamente, no sin antes cruzar una última mirada con él…Era una mirada cargada de odio, decepción, rabia…

-¿ya está arreglado?-pregunto el camarero antes de salir del restaurante.

-sí, ya se lo hemos dicho…-le respondió Luke con un tono agrio y duro.

-¿qué le ha pasado en la cara señorita?-me miro atentamente.

-nada, soy muy torpe…-salimos rápidamente de allí. Nos dirigimos hacia la moto de Luke.

-¿seguro que estas bien Sele?- pregunto mientras la encendía

-sí, bueno…me duele. Ya se me pasara-le sonreí tiernamente mientras seguía pensando en lo sucedido. Me levanto la cabeza delicadamente.

-ni se te ocurra comerte la cabeza, este tío es un idiota. Lo único que le importa es él. Él, él y nadie más. Y es un hijo de…su madre por haberte pegado.-me rozo suavemente donde había recibido el golpe.

-ya bueno…vámonos.- antes de ponerme el casco Luke me dio un beso en la frente. Le mire tristemente. Me abrazo fuertemente, sin querer unas lágrimas se me escaparon. Sin embargo Luke estaba a mi lado y me sentía segura, él era el único que estaba atenta de mi…siempre era él….